Ya hablamos sobre el rendimiento de nuestro vehículo en verano o con temperaturas muy elevadas, si aún no lo has leído te invitamos a leerlo.
Esta vez hablaremos del rendimiento de nuestro vehículo a temperaturas bajas, como ya sabéis el invierno está cerca y siempre hay que prevenir averías que podrían dificultar la circulación o interrumpirla.
Hablaremos de los componentes que afectan directamente a nuestro vehículo. Empezaremos con las baterías, aquellas que tienen una vida útil de 3 a 4 años.
Entonces, ¿por qué fallan muy a menudo en invierno? La respuesta está en la reacción química que elabora esta, con el frío aumenta la viscosidad del ácido sulfúrico, dificultando la reacción y tiene que hacer un sobre esfuerzo como consecuencia. El primer consejo que podemos ofrecer es cambiar la batería cada dos años, si prevenimos el mal funcionamiento de la batería podremos evitar contratiempos o que el vehículo nos falle en algún momento puntual e importante. El segundo consejo importante es visitar el taller si notas dificultad al arrancar o detectar el piloto, revisarán el estado resolviendo tus dudas y si es necesario la cambiarán por una nueva. También se aconseja limpiar los bornes de la batería (con cuidado) y apretar su conexión.
Los neumáticos también sufren con el frío, es muy importante revisar la presión de estos para tener un buen funcionamiento, tanto de frenada como adherencia (puede variar según los grados en los que estemos circulando). Una parte fundamental del neumático es el dibujo de la banda de rodadura, ya que estas fechas siempre van acompañadas de lluvias. Podremos revisar el mínimo legal de 1,6 mm (no recomendable) para que el neumático sea capaz de evacuar correctamente el agua y evitar el riesgo de sufrir aquaplaning, en resumen la mejor solución es un buen mantenimiento del neumático.
El líquido más importante en este periodo de frío será el anticongelante (consigue siempre la temperatura óptima de funcionamiento de nuestro motor), deberá siempre aguantar las bajas temperaturas y recomendamos revisar el nivel y además cambiarlo una vez alcanzado los kilómetros marcados por el fabricante.
Por último hablaremos de las luces y el parabrisas, las luces son un elemento muy importante en invierno ya que los faros se pueden empañar y al mismo tiempo estar sucios, recomendamos comprobar su estado (funcionamiento) y regularlos correctamente para tener mayor visibilidad y para que los otros usuarios puedan localizarnos sin dificultades.
En el caso del parabrisas, debe mantenerse limpio para una correcta visión del conductor (comprobaremos también el limpiaparabrisas para ver si funciona, como ya hemos comentado antes, en invierno será cuando más lo utilicemos). También revisaremos el nivel del líquido limpiaparabrisas.
Para terminar, creemos que el término invierno y condiciones desfavorables van unidas y es por ello que te recomendamos leer nuestros consejos y evitar cualquier tipo de susto y viajes siempre seguro/a.
Y tú, ¿Te atreves a compartir algunos de tus consejos?
